Sheinbaum responde a EU tras acusación de lavado contra bancos: “No hay pruebas”

El 25 de junio, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos encendió las alarmas tras señalar a tres instituciones financieras mexicanas —Vector Casa de Bolsa, Intercam Banco y CIBanco— por presuntos vínculos con lavado de dinero y delincuencia organizada. La reacción no se hizo esperar. En la conferencia matutina del 26 de junio, la presidenta Claudia Sheinbaum salió al paso: “No hay pruebas, y sin pruebas no hay delito”, sentenció.
La mandataria, firme desde Palacio Nacional, recalcó que el gobierno mexicano actúa con base en evidencia, no en suposiciones ni presiones extranjeras. Su mensaje fue claro: “A México se le respeta”.
De acuerdo con Sheinbaum, el Departamento del Tesoro compartió información sobre ciertas transferencias entre empresas chinas legalmente constituidas y las instituciones financieras mexicanas mencionadas. Sin embargo, esa información no constituye prueba alguna de actividades ilícitas, según la revisión de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
En total, se detectaron transacciones realizadas por más de 300 empresas mexicanas a firmas chinas a través de diez instituciones nacionales. Esto, según el gobierno mexicano, responde al alto volumen de comercio bilateral, que asciende a 139 mil millones de dólares anuales, y no implica por sí mismo lavado de dinero.
La CNBV inició una revisión formal de las instituciones señaladas. Hasta el momento, los hallazgos han derivado en sanciones administrativas por irregularidades normativas, sin que se detecten indicios de delitos financieros.
Las multas impuestas ascienden a 134 millones de pesos, resultado de procedimientos dentro del marco legal mexicano. Este proceso, según Sheinbaum, demuestra la autonomía y eficacia de las instituciones mexicanas.
Durante su intervención, la presidenta subrayó un mensaje contundente: “México no se subordina a nadie. Somos libres, soberanos e independientes”. Rechazó cualquier trato desigual por parte de EE.UU. y recordó otros episodios similares, como el del general Salvador Cienfuegos, quien fue detenido sin pruebas y posteriormente liberado.
La mandataria reiteró la disposición a colaborar, pero no a obedecer sin sustento:
“Si hay pruebas, actuamos. Pero si no las hay, no podemos aceptar acusaciones sin fundamento”, expresó con firmeza.
Mientras se desarrollaba este episodio, el Senado de la República aprobó una reforma clave en materia financiera: una nueva legislación para prevenir que recursos ilícitos contaminen el sistema financiero.
Con 74 votos a favor, 13 en contra y 19 abstenciones, se aprobó una iniciativa que modifica la Ley Federal para la Prevención e Identificación de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita y el Código Penal Federal. El objetivo es claro: cerrar brechas legales y fortalecer la cooperación interinstitucional.
Entre los cambios, se incluyen:
- Nuevas actividades vulnerables como el desarrollo inmobiliario y activos virtuales.
- Obligaciones más claras para notarios y corredores públicos.
- Definiciones clave como «beneficiario controlador» y «persona políticamente expuesta».
La presidenta Sheinbaum dejó en claro que México mantendrá su política de cooperación bilateral, pero bajo términos de igualdad y con base en el respeto mutuo. La exigencia de pruebas no es solo una defensa institucional, sino una reafirmación de soberanía.
Mientras tanto, la UIF y la CNBV continuarán con las investigaciones correspondientes. En paralelo, el Congreso avanza en robustecer el marco legal para combatir operaciones ilícitas, reforzando el mensaje de que México no tolerará impunidad, venga de donde venga.
La Verdad Yucatán